Dos pequeños hermanos de 1 y 3 años están hospitalizados en estado crítico tras ingerir accidentalmente veneno para cucarachas en el municipio de García, Nuevo León, en un caso que ha encendido las alarmas sobre el manejo de sustancias peligrosas en hogares con niños.
La Secretaría de Salud de Nuevo León, a través de su titular Alma Rosa Marroquín, informó que los efectos del veneno son altamente corrosivos e irritantes, y podrían provocar daños severos en el esófago, la mucosa y el estómago, afectando a los menores a corto, mediano y largo plazo.
Aún se desconoce el alcance del daño en los niños
Los menores, identificados como Damián y Bayron, fueron trasladados al Hospital 25 del IMSS, donde están siendo monitoreados por un equipo especializado. Hasta el momento, no se ha determinado el impacto completo que la sustancia tóxica tuvo en sus organismos, y se espera que en los próximos días se compartan actualizaciones sobre su evolución médica.
Llamado urgente a la prevención en casa
Durante su presentación diaria, la secretaria Marroquín subrayó la importancia de mantener productos tóxicos fuera del alcance de los niños, especialmente aquellos en etapas tempranas de desarrollo, quienes tienden a explorar su entorno sin conciencia del peligro.
“La exposición a este tipo de venenos puede dejar secuelas permanentes. Hacemos un llamado urgente a madres, padres y cuidadores para que extremen precauciones en casa”, señaló la funcionaria.
Productos de uso común, un riesgo potencial
Este incidente expone un problema recurrente: el mal almacenamiento de sustancias tóxicas en el hogar, como venenos, limpiadores y productos químicos de uso cotidiano que, si no se guardan adecuadamente, pueden convertirse en un riesgo letal para los más pequeños.
